MIAMI.– Un consejo a quienquiera que esté considerando aspirar a un escaño de la Cámara de Representantes de EE.UU.: mejor que usted sea rico o tenga amigos y benefactores ricos dispuestos a gastar dinero en usted.
Si sus planes son de una campaña más idealista de poco dinero, en la que usted toca a la puerta a los donantes y conoce personalmente a los electores (una campaña para la que usted tiene derecho si obtiene que un porcentaje de electores firmen una declaración jurada que le permita a usted eludir los más de $10 000 dólares que necesita para calificar), entonces, me quito el sombrero ante usted.
Puede que incluso llegue a ser una experiencia instructiva, en especial si usted es profesor de Historia o de Cívica. O quizás usted esté sumergiéndose en lo que comentaban los griegos cuando inventaron la democracia. Pero en cuanto a ganar… ¡por favor!
Un millón de dólares en el banco ya no es suficiente en la política norteamericana.
No es de extrañar que algunos expertos en política estén hablando de plutocracia. Un diccionario gratuito que yo uso en Internet define la plutocracia como “Un gobierno o estado en el que mandan los ricos”. ¿Les suena familiar?
He aquí una lista de los 10 candidatos de la Florida aspirantes a la Cámara de Representantes con la mayor cantidad de dinero para gastar hasta este momento. Por favor, fíjense que el dinero en grande aún está por llegar. Las primarias, recuerden, son en septiembre, las elecciones verdaderas en noviembre. La información procede del Herald Tribune de Sarasota:
1. Representante Patrick Murphy (demócrata-Jupiter): $2,67 millones – Seis republicanos batallan entre sí para retar a Murphy en noviembre. Se considera que cualquiera puede ganar esta contienda. El hecho es que Murphy necesitará más dinero.
2. Representante Ileana Ros-Lehtinen (republicana-Miami): $1,91 millones – Ros-Lehtinen NO tiene retadores este año. Pero aún está acumulando. Este dinero puede ser usado en futuras contiendas. O ella puede acumularlo y quedarse con él si algún día decide retirarse. Sí, la ley permite quedarse con el dinero que tiene en el banco como miembro del Congreso si uno decide que está bueno ya.
3. Representante Joe García (demócrata-Miami): $1,86 millones – Hay cinco republicanos en la contienda primaria. Carlos Curbelo, como verá en el lugar 6 de esta lista, se ve como un posible contendiente. Y Curbelo ha demostrado ser un buen recaudador de fondos –especialmente para alguien que no está en el cargo. Esta terminará por ser una contienda muy cara.
4. Gwen Graham (demócrata-Tallahassee): $1,57 millones – La Sra. Graham compite contra Steve Southerland quien ocupa el escaño. Como hija de un exgobernador de la Florida y exsenador federal, Graham puede obtener dinero, como está demostrando.
5. Representante Steve Southerland (demócrata-Panama City): $1,39 millones – En busca de un tercer período, Southerland es vulnerable. Compite contra la bien financiada hija de un ícono de la Florida. (Ver número 4)
6. Carlos Curbelo (republicano-Miami): $884 000 – Curbelo parece ser el único que puede enfrentarse a Joe García en noviembre. (Ver número 3)
7. Representante Vern Buchanan (republicano-Longboat Key): $748 000 – A Buchanan, elegido por primera vez en 2006, lo reta ahora el demócrata Henry Lawrence. Buchanan también ha sido reconocido por publicaciones nacionales como uno de los políticos más corruptos de la nación.
8. Representante Ron DeSantis (republicano-Ponte Vedra Beach): $743 000 – DeSantis es un republicano del nordeste de la Florida. Lo reta un hombre con $2 000 dólares en su cuenta bancaria.
9. Representante Kathy Castor (demócrata-Tampa): $730 000 – Al igual que Ileana en el número 2, Castor no tiene oponente.
10. Representante Bill Posey (republicano-Rockledge): $606 000 – He aquí otro caso de un ocupante del escaño que es retado por un individuo escasamente financiado con $4 300 dólares en el banco.
Y estos 10 representan la cámara baja del Congreso. Una contienda senatorial es mucho más cara. En cuanto a la contienda de este año para gobernador, se espera que los principales candidatos excedan la cifra de $100 millones en gastos.
Así que permítanme preguntarles: ¿plutocracia o democracia? Me gustaría conocer su opinión.
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